La historia de la humanidad ha ido cambiando y por lo tanto
los juegos y los juguetes se han ido adecuando. Ahora, se juega con el celular
con la computadora, la Tablet, y una serie de otros hallazgos tecnólogicos, que
sólo los niños, saben manejar.
Para entender este proceso, se podría resumir en tres
palabras clave: tradición, televisión y tecnología.
La tradición identifica los juegos pasados, realizados por
quienes, hoy en día, tienen más de cincuenta. En ese tiempo, no había tantos
juguetes, y la diversión estaba afuera, a la salida del colegio o con los
amigos de la esquina.
La televisión entre los años 70 y 80, puso la diferencia.
Los jóvenes que hoy tienen más de 25 años recuerdan cómo se entrelazaban los
juegos de la calle, con la televisión infantil.
Y la tecnología actual, rápida, explosivas, veloz, comparte
con la televisión, su reinado. Detallemos: con la computadora, con Internet y
los juegos de video, etc.
Todos los extremos son malos
En la sociedad en la que estamos parece que el juego en los
niños pequeños, se queda a un lado, para pasar a hacer otras cosas que nos
ahorran tiempo y nos libera de cuidados personales.
Los niños necesitan tiempo de ocio y juego libre para poder
ser más creativos y también, para poder desarrollarse de una forma sana y
feliz. Hace tan sólo algunas décadas, el juego era totalmente diferente a como lo es, hoy en día.
Esta tendencia inquieta mucho a padres y educadores, que
observan cómo el juego de los niños ha pasado a un plano más individual,
tecnificado y complejo que hace pensar en su distanciamiento social.
El buen desarrollo
Los niños de todos los niveles, desde sus primeros años de
vida, tienen juegos simples y a medida que crecen, van usando nuevos elementos
y más complejos. En los estratos más pobres, siguen practicándose juegos
simples en los cuales, no se emplean demasiados instrumentos para llevarlos a
cabo. A medida que aumenta el estrato socioeconómico, el desarrollo tecnológico
se hace más evidente y posible de adquirir. Habría que dejar un poco de lado el
entretenimiento tecnólogico de los niños, para equilibrar con las bondades de
la socialización, la creatividad y la alegría. El espacio con la arena, los
árboles, la tierra y el agua, hacen falta para ampliar las posibilidades de los
niños. Es importante que los adultos entiendan que, más allá de controlar o
influenciar las diversiones de los niños, estén dispuestos a darles el espacio
que demandan para expresarse a través de una dimensión del juego, y que
recuerden que sólo se logra con otros niños de su edad. No se puede ni debe
creer que, dado que no hay tiempo de las corridas del trabajo o del estudio,
con la presencia de una mamá o papá que juega o se tira al suelo con el niño,
se puede remplazar la presencia de otro niño a la hora de jugar. Digo esto
porque muchos mayores responsables de la crianza de un menor, me han expresado con orgullo, su
dedicación destinada a suprimir la presencia de otro niño. Todo lo cual es una
falacia, no sirve, no es facilitadora de la socialización que el niño necesita.
El niño debe aprender a compartir, a resolver sus obstáculos, a entender y
hacerse entender con el otro, que es diferente, y muuuchas cosas más Así,
seguramente, podrán aprender de los niños y volverán a conectarse con su niñez
oculta en un rincón de la memoria. Manifestarán sus emociones, su creatividad,
compartirán y modelarán su humor; fortalecerán su intelecto y su autonomía.
En síntesis: ¿Les parecen poco los resultados? Y no tienen
gastos en dinero, hechos muy importantes en época de crisis. En esto sólo hay
gasto de tiempo y dedicación. Les deseo éxitos.
fuente: telemundo.com