ESTIMULACIÓN TEMPRANA O ESTIMULACIÓN
ADECUADA
La Estimulación Temprana no es simplemente una serie de ejercicios,
masajes o juegos (sin un propósito claro). Es conocer el proceso de desarrollo
de un niño.
La Estimulación Temrpana NO depende de la edad del niño, sino de la oportunidad
que se le haya dado de recibir estímulos y permitir poner a prueba las
habilidades adquiridas.
La Estimulación Temprana debe ser integral tanto física como
intelectual.
Es común encontrar personas geniales físicamente (deportistas)
pero incapaces de sostener una charla amena e interesante, al igual que otras
geniales intelectualmente incapaces de coordinar una carrera de 20 mts. La
Estimulación debe ser tanto física como intelectual.
Lo que realmente se debe tener en cuenta para una
ESTIMULACIÓN ADECUADA es la motivación, La estimulación debe ser sinónimo de
felicidad. El cerebro humano es tan dinámico que es muy fácil formar personas
llenas de conocimientos o habilidades, pero sin motivación, ni pasión. También
personas que al ser estimuladas incorrectamente, no son lo que sus
estimuladores quisieron que fueran (deportistas, músicos, etc.) sino por el
contrario serán (anti-deportistas o anti-artistas) lo que realmente sería el
producto de la también existente ESTIMULACIÓN IN-ADECUADA que origina los "sabelotodo" pero incapaces de
crear, organizar y gestionar.
¿Alguna vez se
preguntaron el motivo por el que los seres humanos dependemos de los padres
durante tanto tiempo en comparación con el resto de animales? La razón está en
nuestro cerebro, cuya maduración requiere mucho más tiempo que el de la mayoría
de especies. Todos hemos visto imágenes de animales que a las pocas horas de
nacer ya caminan al lado de sus madres sin aparente dificultad. Desde luego, la
supervivencia de un cervatillo resultaría muy difícil si éste no fuera capaz de
seguir a su madre, que continuamente se está desplazando en busca de pastos
frescos o si no pudiera correr a las pocas semanas ante la presencia de un
depredador.
Un bebé humano, sin embargo, tarda algo más de una año en
empezar a caminar, por lo que su supervivencia depende en extremo de la
protección de la madre.
El caminar no es una habilidad innata que posea el bebé, sino que es el resultado de un aprendizaje. Un recién nacido sólo muestra un limitadísimo conjunto de capacidades si las comparamos con las que irá adquiriendo con el transcurso de los años y la mayoría de habilidades que posee están relacionadas con su supervivencia: succionar para poder alimentarse, llorar para atraer la atención de su madre, o cerrar las manos para intentar aferrarse a aquello que las toca.
El caminar no es una habilidad innata que posea el bebé, sino que es el resultado de un aprendizaje. Un recién nacido sólo muestra un limitadísimo conjunto de capacidades si las comparamos con las que irá adquiriendo con el transcurso de los años y la mayoría de habilidades que posee están relacionadas con su supervivencia: succionar para poder alimentarse, llorar para atraer la atención de su madre, o cerrar las manos para intentar aferrarse a aquello que las toca.
Esta total indefensión es consecuencia de un cerebro aún por
formar. Pero esta circunstancia que puede parecer en principio negativa
conlleva, en realidad, una enorme ventaja: el bebé será capaz de adaptarse
mucho mejor al entorno y a las circunstancias cambiantes que cualquier otro
animal cuyo cerebro ya esté programado en el momento de nacer. Disponer de un
cerebro moldeable es lo que ha permitido a la especie humana progresar y
sobrevivir incluso ante las condiciones naturales más adversas.