Desde ya que tener un buen diálogo con la/las docentes es
fundamental. Es importante poder tener una entrevista al inicio del año, para conocerse y poder contarle desde su
perspectiva de papás como es su hijo y también plantear todas sus dudas. Ese
conocimiento es muy favorecedor y será la punta del ovillo en la colaboración
mutua de la formación del niño. Normalmente las maestras tienen estipulada esa
entrevista de antemano pero si eso no pasara, es importante que los papás la
soliciten.
En cuanto a la participación en las actividades
escolares, muchas veces es difícil que puedan asistir los dos papás juntos, por
motivos laborales o de ocupaciones pero los niños valoran mucho esa
participación, la esperan y se ponen muy
contentos cuando ven a los padres en SU
jardín. Es bueno conversarlo en familia y poder turnarse para que por lo menos
uno de los dos pueda asistir. También pueden participar tíos, padrinos y
abuelos.
También, que las actividades que trabajan en el colegio
sean luego afianzadas en casa es algo muy positivo. Complementar algún tema
proporcionándoles revistas, materiales, contándoles un cuento alusivo o viendo
una película al respecto es reforzar lo
aprendido. Lo importante es no excederse. Acompañar es la palabra clave.